Solo los estúpidos no cambian de opinión

Solo los estúpidos no cambian de opinión reúne en un volumen una serie de entrevistas prolongadas hechas a Teodoro Petkoff en el año 2006, la mayoría de ellas en la sala de su casa. Esta fue una aproximación que quiso analizar, de forma retrospectiva y de manera crítica, cada uno de los relieves vitales en el tránsito público de uno de los dirigentes políticos más influyentes, de mayor incumbencia pública, de perfil más específico e intelectualmente más dotado de la política venezolana de este tiempo. Aunque no todos le han tenido simpatía –en el ejercicio de la política, tal requerimiento constituye un imposible–, el análisis incisivo de Petkoff, su verbo apasionado y preciso, su formación intelectual, su obra escrita, su integridad personal y su enorme coraje cívico lo han convertido en una de las figuras más respetadas y más reconocidas de la escena venezolana en América Latina, siendo galardonado en España con el Premio Ortega y Gasset por su postura frontal en la defensa de las libertades públicas. El lector debería animarse a recorrer estas páginas con curiosidad, liberado de prejuicios, procurando atrapar con el relato una nítida fotografía, un excelente ejemplo de aquello que ha constituido las tensiones y dilemas políticos de la segunda mitad del siglo XX y el comienzo del XXI. Aquí quedan plasmados muchos detalles y matices de interés sobre la evolución de nuestra sociedad. Asumiendo como naturales algunas contradicciones inherentes a la política, campo que, con sus zonas de brillo y sus espacios de oscuridad, constituye el más humano de todos los oficios de este mundo.